En el marco de la 41° Feria Internacional del Libro de Santiago, este sábado 19 de noviembre, la Cámara Chilena del Libro hizo entrega del reconocimiento FILSA Patrimonio Literario y Cultural a la Sociedad de Escritores de Chile SECH, por su trayectoria y aporte en el quehacer literario, la difusión del libro y la lectura, y al Centro Cultural Estación Mapocho por su trayectoria y relevancia como cobijo de las distintas expresiones del arte, de la cultura y, en particular, de la Feria Internacional del Libro de Santiago desde hace 33 años.
Estos reconocimientos, entregados por el presidente de la Cámara Chilena del Libro, Eduardo Castillo, fue recibido por la presidenta del Directorio del Centro Cultural Estación Mapocho, la gestora cultural, Ana Carolina Arriagada Urzúa, y el presidente de la Sociedad de Escritores de Chile SECH, el poeta y periodista David Hevia.
La Sociedad de Escritores de Chile, fundada en noviembre de 1931, es la institución más representativa de los escritores en Chile y está integrada por autores de los distintos géneros literarios: poesía, cuento, novela, ensayo y drama. Actualmente cuenta con más de setecientos socios activos desde Arica a Punta Arenas, a través de sus filiales a lo largo del país, más dos sedes en el extranjero en Londres y Nueva York.
A lo largo de sus 85 años de historia, han formado parte del directorio figuras tales como Pablo Neruda, Gonzalo Rojas, Nicanor Parra, Rubén Azócar, Luis Sánchez Latorre, Ester Matte Alessandri, Martín Cerda, Poli Délano, Ramón Díaz Eterovic, entre otros. Muchos de sus miembros han obtenido el Premio Nacional de Literatura y dos de ellos el Premio Nobel de Literatura: Gabriela Mistral y Pablo Neruda.
Por su parte, el Centro Cultural Estación Mapocho, tras ser inaugurado en 1994 en el Monumento Nacional Estación Mapocho, ha sido concebido como un espacio patrimonial destinado a la difusión cultural del país, que acoge a casi un millón de visitas por año, en las más diversas expresiones artísticas y culturales. Además, es un punto de encuentro en torno a ferias, congresos y conferencias internacionales. Su historia y ubicación privilegiadas en el corazón de Santiago han convertido a la ex estación de ferrocarril en un referente cultural para visitantes nacionales y extranjeros.
Su misión de difundir la cultura y preservar el patrimonio ha sido también reconocida con el Premio Internacional Reina Sofía de Conservación y Difusión del Patrimonio Cultural 2009 y, en 2005, con el Premio Patrimonio de la Ciudad, con motivo de la celebración de los cien años de la Estación Mapocho y los quince años de autogestión como centro cultural.